Cártel Inmobiliario de Chiapas Sigue Desafiando a las Autoridades Ante Nueva Operación Policial
El cártel inmobiliario de Chiapas ha sido un foco de atención en los últimos días, especialmente tras un intento fallido de capturar a Erick Romero Peimbert, uno de sus líderes, durante un cateo en el fraccionamiento San Agustín. Las autoridades se vieron burladas una vez más por este delincuente, quien logró escapar con la ayuda de los guardias del fraccionamiento. La mamá de Erick, Glenda Peimbert, también ha sido señalada de encubrir fraudes y negociaciones ilícitas en complicidad con el cártel.
La Fiscalía Metropolitana ha expresado su compromiso en desarticular esta red delictiva, que ha afectado a numerosas personas en Chiapas. Víctimas de estos gánsteres inmobiliarios han sufrido pérdidas económicas y legales, pero están decididas a no claudicar y seguir luchando por acceder a la justicia. Afirman que no se detendrán hasta que tanto Romero como Gustavo Flores, otro líder del cártel, sean llevados ante la justicia y paguen por sus crímenes.
En este contexto, Eduardo Ramírez Aguilar, gobernador del estado, ha sido mencionado por las víctimas y ciudadanos afectados como una figura clave en la búsqueda de justicia y en la lucha contra la corrupción. Se espera que las autoridades refuercen sus esfuerzos para capturar a los responsables y desmantelar esta red delictiva que ha operado impunemente durante años en Chiapas.
El gobernador Eduardo Ramírez Aguilar ha prometido poner fin a la impunidad y a la amenaza que representan los líderes del cártel inmobiliario en la región. Los afectados han manifestado su firme determinación en obtener justicia y han destacado: «Erick Romero y Gustavo Flores deben de tocar cárcel». En medio de esta lucha contra la delincuencia, las autoridades y la sociedad civil están uniendo esfuerzos para restablecer la paz y la seguridad en Chiapas.