Políticas Antimigrantes de Trump Impactarán Empresas en EE.UU.
La relación bilateral entre Estados Unidos y México sigue tensa debido a las políticas antimigrantes implementadas por el expresidente Trump, las cuales están teniendo consecuencias del lado estadounidense. Empresas y sectores como el de alimentos y autopartes se verán afectados por estas medidas que fueron anunciadas tras la firma de órdenes para imponer aranceles a varios países, incluido México. Sin embargo, antes de que estos aranceles entraran en vigor, se acordó posponer su imposición por un mes tras conversaciones entre Trump y la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum.
De acuerdo con analistas, las empresas estadounidenses se verán perjudicadas por las políticas arancelarias de Trump contra México, ya que ambos países mantienen una relación comercial estrecha en la que productos como tomates, aguacates, cerveza mexicana, tequila y autopartes son de vital importancia. Además, México exporta una gran cantidad de vehículos a Estados Unidos, lo que impactaría directamente a fabricantes como General Motors y Ford, que tienen plantas en territorio mexicano.
Según Mary Lovely, del Instituto Peterson de Economía Internacional, la imposición de aranceles corre el riesgo de afectar la economía estadounidense y aumentar la inflación, mientras que Christine McDaniel, investigadora del Mercatus Center de la Universidad George Mason, señala que estas medidas podrían debilitar la potencia económica de América del Norte. En este sentido, las consecuencias de estas decisiones podrían representar un autogol para Estados Unidos en el ámbito económico.
En palabras de la investigadora Mary Lovely: «Esto puede ser el mayor autogol de todos. Es una enorme apuesta. Es una receta para desacelerar la economía y aumentar la inflación».
Por su parte, Christine McDaniel, exfuncionaria comercial en el Gobierno del presidente George W. Bush, también criticó la imposición de aranceles, indicando: «¿Por qué querrías quemar tu propia casa?». La incertidumbre sobre el impacto de estas medidas tanto en la economía estadounidense como en la mexicana se mantiene a la espera de lo que suceda en los próximos meses.