Militar en Prisión Recurre a la CIDH en Ciudad de México: Violaciones al Debido Proceso

27 de agosto de 2023 – Ciudad de México

Un caso que ha conmocionado a la opinión pública y ha planteado serias interrogantes sobre el sistema de justicia en México se ha vuelto a poner en el centro de atención. Jorge Alberto Tadeo Hernández, un subteniente de Infantería del Ejército mexicano, lleva más de una década tras las rejas sin recibir una sentencia condenatoria por los cargos de homicidio y tortura que se le imputan.

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La historia de Tadeo Hernández comienza en 2011 cuando, en el ejercicio de sus deberes como comandante de una Base de Operaciones Mixtas, detiene a un miembro de «Los Zetas» por posesión de drogas y armas de uso exclusivo del Ejército. Desde entonces, este militar ha estado en prisión preventiva, pero su caso ha estado plagado de irregularidades.

En su desesperada búsqueda de justicia, Tadeo Hernández se ha dirigido a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en busca de asesoría y defensoría legales. En una carta fechada el 24 de agosto de 2023, el subteniente expone su angustia, afirmando que «hasta el día de la fecha, tengo 12 años y meses sin que se demuestre mi culpabilidad en los hechos que se me imputan, es decir, no tengo ninguna sentencia».

Entre las violaciones al debido proceso que denuncia, destaca que nunca ha tenido una adecuada defensa técnica y objetiva, y que se le ha impuesto un aislamiento casi total, lo que ha dificultado cualquier intento de ejercer su defensa. Además, señala que la averiguación previa está «viciada», ya que fue realizada por ministerios públicos militares y revisada por un coronel de justicia militar.

El militar preso también acusa a las autoridades de inventar supuestos delitos, como homicidio calificado, tortura y robo con violencia, sin indiciar a los testigos militares que se autoinculparon de otros delitos en sus declaraciones. Tadeo Hernández insiste en que solo siguió órdenes de sus superiores durante el operativo en el que se le acusa de cometer estos delitos.

Este caso arroja luz sobre la necesidad de una revisión profunda del sistema de justicia en México y plantea interrogantes sobre la presunción de inocencia y el debido proceso en el país. La CIDH ahora debe tomar cartas en el asunto y decidir si este militar ha sido víctima de una injusticia prolongada o si, de hecho, existe evidencia suficiente para justificar su prolongada detención sin sentencia.